No sé a dónde voy cuando me pierdo en el tiempo. Dos cosas. La primera: mis amigos me han dicho lo joven que me veo. Probablemente es verdad que me he perdido en el tiempo. Aunque creo que algo así no pueda ser cierto. Pero no entiendo bien la realidad, y me es difícil describirla tanto como a sus posibilidades. Lo segundo: he estado en un trabajo en donde el tiempo desaparece. Donde las semanas pasan como si fueran días. La elasticidad del tiempo en este lugar parece obedecer a reglas particulares, más psicológicas que físicas. O bien, más oníricas que reales.
Pensado de esta forma, perderse en el tiempo, en ambos casos, podría ser perfectamente posible.
Buenísimo, viajero del tiempo. Me gustó
Me gustaLe gusta a 2 personas
Gracias Dani.
; )
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muy bueno
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias, amiga. Un abrazo.
Me gustaMe gusta